El gorro quirúrgico tiene una función importante a la hora de ponerse manos a la obra en un quirófano. Se utilizan para prevenir infecciones, por motivos de higiene y seguridad para el paciente, actuando como barrera de protección entre el equipo médico y el paciente. El gorro de quirófano previene la proliferación de microorganismos en el cabello y la sudoración que se produce en la cabeza. Pero, ¿qué gorro es mejor utilizar uno de tela o uno reciclable?
Según un estudio publicado por Medscape, los gorros de tela protegen más al sanitario frente a los agentes contaminantes que puedan encontrarse en la sala de operaciones e impiden, también, que los pelos puedan llegar al paciente.
Un equipo formado por microbiólogos, higienistas, cirujanos e ingenieros especializados en investigación colocaron detectores de partículas en el quirófano y simularon tres intervenciones quirúrgicas durante 1 horas cada una. En las distintas intervenciones llevaban 3 gorros distintos: uno estilo bouffant, otro desechable y otro de tela.
Tras llevar a cabo esta prueba, detectaron más partículas en el aire cuando los cirujános llevaban el gorro estilo bouffant y el reciclabe. Se descubrió que estos dos últimos eran permeables y porosos, lo que provocaban un mayor acumulo de microbios y bacterias.
Por lo tanto, los gorros de tela son considerados más resistentes en cuanto a reducir riesgos de contaminación. Además, son más duraderos ya que se pueden utilizar una y otra vez, siempre que se lave habitualmente. Y existe un premisa que uses el gorro que uses siempre se debe cumplir: “las orejas, el cuero cabelludo, las patillas y la nuca del sanitario deben estar siempre cubiertas durante una intervención”.
Y vosotros, ¿que prefís el gorro de quirófano de tela o reciclable?